Amparo Poch y Gascón: una vida de lucha y compromiso
El 15 de octubre de 1902 nacía en Zaragoza (España) Amparo Poch y Gascón. Médica, activista, periodista, sindicalista, ginecóloga, anarquista, pacifista y feminista, Amparo fue una figura clave en la defensa de los derechos de las mujeres y la salud pública.
Creció en una familia conservadora, con un padre militar muy autoritario. Desde joven, mostró gran inteligencia y una fuerte determinación por estudiar medicina. Sin embargo, su padre se opuso firmemente, considerando que “no era una carrera de mujeres”. En lugar de ello, optó por estudiar Magisterio, donde obtuvo el premio extraordinario de licenciatura. Más tarde, en 1922, logró su sueño de estudiar Medicina, obteniendo matrícula de honor en todas las materias y un premio extraordinario de su promoción.
Su primer consultorio médico se estableció en una sala de su propia casa, dirigido principalmente a la población obrera, con un enfoque especial en mujeres y niños. Cofundadora de la revista Mujeres Libres, Amparo escribió diversas publicaciones sobre los derechos y la libertad sexual de las mujeres, abordando temas como la higiene, la sexualidad, la planificación familiar, la maternidad y el amor libre.
Durante la II República, trabajó en el Ministerio de Sanidad junto a Federica Montseny, donde ocupó el cargo de directora de Asistencia Social. En este rol, organizó programas para ayudar a los huérfanos de la guerra, facilitándoles la búsqueda de hogares.
En 1939, debido a la represión franquista, tuvo que exiliarse en Francia. A pesar de numerosas dificultades, trabajó infatigablemente realizando toda clase de trabajos. Más tarde, continuó su vida profesional como médica en la sección española de Solidaridad Internacional Antifascista en Toulouse, donde falleció el 15 de abril de 1968 a causa de un cáncer cerebral.
Amparo Poch y Gascón fue una mujer brillante, con un enorme compromiso y calidad humana, dedicada por entero a las personas más vulnerables.
“La mujer nueva no puede llenar con el amor su existencia. Necesita buscarse y encontrarse a sí misma en variadas actividades, en la profesión elegida, en el estudio al que se ha consagrado, en el taller, en la fábrica y en la Universidad”.
Amparo Poch y Gascón – La vida sexual de la mujer
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