El día que las mujeres hicieron huelga, el conocido como «El viernes islandés», puso de manifiesto el enorme poder del trabajo de las mujeres.
El 24 de octubre de 1975, el 90% de las islandesas se declararon en huelga. Ni trabajaron ni cuidaron de sus hijos aquel día. El objetivo era llamar la atención sobre sus bajos salarios y la falta de reconocimiento a su rol en la sociedad y en particular el trabajo doméstico no remunerado, que incluía también el cuidado de los hijos e hijas. La huelga fue organizada por el movimiento de liberación de las mujeres Redstockings (medias rojas), creado en 1970 y compuesto por feministas radicales. Esta huelga tuvo un gran impacto económico en los servicios profesionales realizados por mujeres: (prensa, telefonía, líneas aéreas, escuelas, factorías de pescado). En 1976, el Parlamento islandés garantizó la igualdad de derechos para hombres y mujeres. Foto: Archivo Histórico de la Mujer de Islandia